Una ciudad es una mitología.
La casa donde vivió Gardel, la casa Suiza que ya no está.
Acá hubo una revuelta, por acá abajo pasa un túnel y acá funcionó el Parakultural.
Y allá la tumba de Rufina Cambaceres.
Si no hay esta mitología, no hay ciudad. Puede haber un conjunto de casas, un complejo habitacional, pero no una ciudad.
La existencia y el relato detallado de historias individuales, de mi historia, no es necesaria porque la mitología presupone multitud de historias individuales. Miles de novelas. Innumerables emociones vividas.
Entonces cada día en una ciudad se convierte en una aventura y todos estamos haciendo historia, mismo desde el anonimato.
Textos poéticos, fotos, música, cosas varias que quiero comunicar a unos pocos amigos pero que permanecían inéditas porque no entran en ninguna clasificación usual ni tienen cabida en otro blog, libro, "producto" o "servicio".
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